Si en marzo La Auxiliar Naval (LAN), empresa situada en el barrio erandiotarra de Lutxana, tenía ciertos visos de continuidad con la esperanza de entrar en un concurso de acreedores que reflotara la empresa, este se produjo semanas atrás cuando el Estado se ponía en estado de alarma ante el COVID 19. 

La Ría Digital ha podido saber que hace dos semanas los trabajadores recibían el auto del juez en el que finalmente no nombraría ningún administrador "por insuficiencia de masa activa" y por consiguiente se procederá al cierre, en consecuencia se ha procedido a su extinción.

Con el cierre de la empresa La Auxiliar Naval (LAN) 25 trabajadores, los que tenía la plantilla, quedarán en desempleo. Trabajadores que desde finales del 2019 vinieron ddenunciando que la empresa les adeudaba nóminas y alertaban de la desaparición de la empresa ante la nefasta gestión de los propietarios. La empresa, ubicada en el barrio de Lutxana, era la única del España y de las pocas de Europa que diseñaba y fabricaba portillos navales. Una especialización que les había permitido trabajar con grandes astilleros; pero ante la deficiente gestión con los proveedores, los pedidos habían descendido y cada vez eran menos.